martes, 4 de febrero de 2020

Mi Jesús Crucificado

Hace unos minutos encontré en el "Facebook" una pregunta que tal vez puede ponernos en discordia con los cristianos no catolicos.  Se hacia la pregunta "Por que la iglesia católica muestra una cruz con Cristo crucificado?  Leí varios comentarios donde se ataca nuestra fé.  En realidad, yo pasé varios años preguntandome la misma pregunta.  Ver a Jesús crucificado me hacía llorar, me hacía recordar cuanto El ha sufrido por mi causa, me sentía culpable de su crucificción, y me obligaba a recordar mis pecados.  No me acostumbraba a observarlo, para mi era demasiado.  No comprendía tanto amor, ese amor que es capaz de dar la vida por el ser amado.  Si, ese ser amado por Jesús, eres tú, soy yo, todos los seres humanos.  Me sentía tan indigna de su amor divino y su sacrificio en la cruz.  Pero poco a poco, aunque aún me duele ver a Jesús crucificado, comprendí que ese crucifijo muestra el sacrificio más grande que alguien jamás hará por mí.  Es una muestra de amor, ahora, verlo trae a mi mente que alguien, precisamente el Hijo de Dios quizo venir al mundo a sufrir en una cruz para que yo pudiera ser salvada, para que tenga la oportunidad de arrepentirme de mis pecados y empezar una vida nueva, una vida en Cristo Jesús.  Muestra para mí, el amor también de Dios Padre, es como si al ver el crucifijo Jesús me hablará y me dijera "Te amo!, no lo entiendes, di la vida por ti, para que seas féliz, no te esclavizes al pecado, no te desanimes, que no harîa Yo por ti, si fui capaz de morir crucificado por ti!" También me da la oportunidad de renovarme, de "verlo", de regresar a su rebaño.  Si, mi Jesús, murió por mi en una cruz y después al tercer día resucitó y ahora está sentado a la derecha de Dios Padre.  Y sin embargo, la corona que El decidió lucir: fue una corona de espinas.  Este es mi testimonio, no tengo la respuesta a la pregunta del "Facebook" , pero sé que por esa cruz hoy puedo tener esperanza no solamente en esta vida, sino también en la que viene después de la muerte.  Si Jesús sufrió por mi, también yo puedo sufrir y ofrecerlo a Dios Padre.  Si, yo también tengo una cruz que llevar y espero que como Jesús resucitó, también yo lo pueda lograr por los méritos de su gloriosa resurrección al final de los tiempos.  Les dejo una cita biblica donde San Pablo habla sobre Jesús crucificado.




1 Corintios 1:23-24 

23 pero nosotros anunciamos a un Mesías crucificado. Esto les resulta ofensivo a los judíos, y a los no judíos les parece una tontería; 24 pero para los que Dios ha llamado, sean judíos o griegos, este Mesías es el poder y la sabiduría de Dios.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario