lunes, 26 de julio de 2021

La Biblia



Este domingo durante la misa, escuchamos el testimonio de una señora que para mi fue muy emotivo.  Nos contó como perdió su madre a la edad de 29 años.  Quize llorar, es la misma edad a la que perdí a mi propia madre.  El relato continuó hasta relatarnos como su madre le recomendó que leyera las escrituras de la Biblia con su esposo.  Esto un día antes del día de las madres, mientra su mamá se encontraba en el hospital.  Al siguiente día murió.  Non sin antes dejar a su hija este consejo y lo mejor que tenía para dejarle como herencia, la propia fe.  Mi mamá murió lentamente, día con día, pues sufría de cancer, yo no estaba en condiciones de cuidarla, por mi naturaleza sensible, aunque cocinaba para ella, pero fue mi hermana la que pasó más tiempo con ella en sus ultimos días.  Mi madre seguido pedía que yo saliera de su cuarto.  No quería verme sufrir por ella.  Mi hermana en cambio, pasaba horas a su lado.  Y mi madre le pedía que le leyera la Biblia, en especial el Salmo 23, como la madre de esta señora le pidió a su hija.  Cuando mi madre falleció, solía tomar su Biblia para leerla y me dí cuenta que mi madre leía la Biblia, tenía varios versiculos coloreados a lo largo y ancho de la Biblia.  En mi parroquia nos han pedido que leyamos los cuatro evangelios en un año.  Yo he leído varios capitulos, no mucho.  Sin embargo, aprendí algo de esta señora, soy usualmente una orante solitaria, y leo la Biblia a solas, espero poder aconsejar a mi hermana de que me acompañe.  Se me ocurrió proponerle que hagamos un pequeño grupo franciscano familiar: ella y yo.  Es decir, que leamos juntas la Biblia y aprendamos de ella juntas, como soliamos hacer cuando eramos parte de la Jufra (jóvenes franciscanos) en México.  Me parece que se le llama "Lectio Divina", lees la Biblia y enseguida profundizas en lo que Dios te está diciendo a ti en ese momento atraves de ella.  Les propongo que hagan lo mismo con sus familias, el texto de la Biblia, es Palabra viva, ya lo dijo San Pedro "Señor, ¿a quién iremos?  Tú tienes palabras de vida eterna."

domingo, 11 de julio de 2021

Comunidad

 Hace unos dias, leí un post en facebook que decía: "normalicemos creer en Dios sin necesidad de creer en la iglesia ó en la religión". Confieso que no supe que pensar, preferí no hacerlo por temor de caer en esa trampa.  Pero Dios que es tan bueno y misericordioso me sacó de dudas en la homilía de este domingo.  Primero, hay que tener en cuenta que Jesús nació, murió y resucitó por cada ser humano: por todos.  Y todos los seres humanos, nos dijo el sacerdote, tenemos el derecho de conocer sobre Jesús, de oir hablar de él.  En el Evangelio de hoy Jesús manda a sus discipulos de dos en dos.  Porque nos dice el sacerdote, lo primero que debemos predicar es con el amor.  Y una persona por si sola, no puede predicar eso.  Recuerdo haber escuchado en un canto ó leído en la biblia que "la señal de los cristianos es amarse como hermanos".   Eso es lo que dice el canto y la biblia nos cuenta de una comunidad de cristianos de los que se decía "miren como se aman". Y se convertían muchas personas por esta razón.  Lamentablemente, recuerdo también lo que dijo Mahatma Ghandi, en tiempos más modernos y es que el sería cristiano si no fuera por los cristianos.  Tenemos que predicar con el ejemplo, hacer comunidad, amarnos los unos a los otros como Jesús nos ha mandado, como El nos ha amado.  Y recordemos que tenemos que estar en comunión con Jesús, creemos en la comunión de los santos, tenemos que estar unidos a Cristo, formar parte de su iglesia, confesarnos, comulgar.  Esto no se puede hacer fuera de la iglesia.  Tal vez ahora es díficil asistir a misa por las restricciones de Covid, pero Jesús te está esperando con los brazos abiertos.  Regresa a la iglesia, ahí esta Jesús, literalmente, presente en la Ostia Consagrada, ahí está su amor, ahí está su perdón, y sus enseñanzas.  Forma parte del Cuerpo de Cristo y de su iglesia.  Dios te bendiga y ójala alguien piense que quiere ser un cristiano por ver como se aman los cristianos a su alrededor.  ¡Hagamos comunidad!